Sevilla y azahar

24 de abril de 2009
Por mucho que queramos criticar nuestra ciudad, realmente es bella. Encima estamos ahora rodeados del olor del azahar.

Olor, color, luz,... son tópicos cuando hablamos de ella. Pero qué realidad es que es una hermosa mujer.

¡Qué lástima que no la cuidemos, que no la valoremos en lo justo! Curiosamente los que dicen más amarla, son los que más la maltratan. ¿Cuándo dejaremos de prostituirla?

Debemos conocerla mejor, amarla y protegerla. Empecemos a acercarnos a ella con este vídeo turístico un poco "typical spanish" de dalealplay para turistas, aunque quizás es el momento de que nosotros, los sevillanos, empecemos a conocerla, al menos como nuestros visitantes.

Belleza

Brujuleando por aquí y por allá, encontré este video en Dailymotion.com.
¡Qué hermoso es nuestro mundo y cómo nos lo estamos cargando! ¡Qué maravillosa metáfora de la realidad es este vídeo!¡Qué lleno de sugerencias!¡Y qué música!
¿Qué podríamos hacer para dejar de mirarnos al ombligo, para dejar de seguir la senda siempre marcada de las hormigas y mirar a nuestro alrededor y ver lo que nos rodea?

Vísperas del día del libro

22 de abril de 2009


Por fin tenemos tiempo para leer un libro.
Elegimos un título, empezamos a leerlo, y lentamente nos damos cuenta de que... tenemos más cosas que hacer. Siempre hay cosas que hacer. ¿Siempre hay cosas que hacer? ¿O son pretextos para no enfrentarnos con un libro? A veces, leemos por obligación, no por placer. Y cuando empleamos para ello el único tiempo de asueto que tenemos, se nos plantean cientos de preguntas.
Pronto comienza el sentido de culpabilidad. "Debo leer, tengo que estar al día de las novedades. Soy profesora de Lengua ... y Literatura". O, ¿acaso con los años me he embrutecido y ya no me gusta leer? ¿Las neuronas se me rebelan hartas de luchar con los alumnos cuando quiero ocuparlas aún más? Tras muchos años llega las dudas.
Realmente ¿debo sentirme culpable también de no tener ganas de abris un libro? ¿No será que, simplemente, no me gusta? ¿Pasa algo si no lo leo hasta el final? ¿Acaso no hay libros bastantes como para no perder el tiempo con uno que no me gusta?

Pero, y si encima es un libro considerado como excelente por la autoridad (¿qué autoridad, por cierto, es objetiva y no responde a intereses económicos, de gremio o...) ¿seré un desastre y mi autoestima como buena lectora se irá definitivamente al garete?
¿Realmente es tan importante leer?

Quizás hemos sobrevalorado la lectura. Constantemente hablamos de cómo la televisión o el cine, o el fútbol embrutecen y alabamos la lectura de un buen libro. Pero las cosas no son ni blancas ni negras: hay buenas películas; hay buenos programas de televisión. Aunque sean pocos. Y frecuentemente los libros sirven para embrutecernos tanto o más que otros medios de comunicación. Nos invitan, o los usamos, para no pensar, para no enfrentarnos con lo que nos rodea.

Demos a la lectura el valor que tiene realmente. La Biblia dice que hay tiempo de nacer y tiempo de morir. Hay tiempo para todo. Hay tiempo de leer porque nos apetece y tiempo de aprender y tiempo de embrutecernos ( sí, por qué no), un poquito.
Vivamos la vida sin tanto machacarnos por todo lo que pensamos o todo lo que deseamos... o no.