GRACIAS, PROFESOR CUYAMI

19 de agosto de 2010
El profesor Cuyami

Estimado Profesor Cuyami:

Esta mañana me he propuesto echar un vistazo a mi blog. Lo tenía abandonado por falta de tiempo, por inercia, por las vacaciones... y por la sensación de que a nadie le importaba lo que yo dijera.

La sorpresa fue que encontré un mensaje suyo. Por fin alguien que me entendía. Y, precisamente, alguien al que respeto. El milagro extraño de que en un periódico se supiera algo sobre cómo sentimos los profesores, se refleja con sus artículos.

En cuanto pude, respondí y, cuando iba a darle a la tecla... se borró todo.

Esta es mi segunda respuesta. No tiene nada que ver con la primera, más espontánea y emotiva, pero quiero que sirva para sepa que he recibido su mensaje y que, como usted, pienso en la enseñanza como algo muy especial y muy duro. No estamos preparados para responder a las necesidades de ciento cincuenta niños por curso, además de enseñarles Geografía, Lengua, o lo que nos toque.

Ellos necesitan muchas veces personas que hagan la labor que sus propios padres no hacen. Por ello, nos convertimos en sus sustitutos, además de terminar siendo los sacos de boxeo de sus frustraciones. ¿Quién no recuerda lo dura que es la adolescencia?

Lo cierto es que nos toca bregar con ellos y sus problemas y no estamos preparados. Por ello a menudo lo pasamos mal. Y ellos, también.

Pero ese trato tan especial con los alumnos nos ayuda a estar en el mundo, en su evolución y en sus cambios. Nos permite comprender la realidad, ... si te implicas en el trabajo a fondo.

Me preocupan muchos compañeros que se apoltronan y que no evolucionan. Son aquéllos que no reaccionan ante nada y que año tras año hacen lo mismo. Sin ilusión. Son los mismos que les hagan lo que les hagan nuestros señores los políticos, no reaccionan. No se rebelan.

Creo en una profesión en la que enseñas una materia, pero también educas y preparas para una realidad y un futuro. Si no eres capaz de tener una pizca de rebeldía, ¿cómo vas a invitar a un alumno a luchar por mejorar su propia realidad y la de la sociedad?

Porque hay que reconocer que nosotros somos lo único que les separa de seguir la senda que la sociedad marcó para sus padres. Gracias a nosotros podrán elegir qué quieren de la vida. Somos una oportunidad.

En una barriada como en la que trabajo, obrera pero rozando la marginalidad, ofrecemos una llave para que abran diferentes puertas. Sólo unos pocos tienen el valor para aspirar a cogerla. Cuando alguno termina el bachillerato, mes gusta decirles "Enhorabuena. Y ahora, a cambiar el mundo"

Y que conste que no me reconozco como revolucionaria o rebelde. Sólo pienso que todo puede mejorar y hacernos mejores. Somos, al menos eso pienso, muy ambiciosos. Más que cualquier partido o sindicato, porque intentamos ser sinceros. Lo difícil es ser consecuentes.

Por favor, siga hablándole al mundo de qué es la enseñanza, qué es lo que intentamos hacer, lo consigamos o no. Por una vez, que se sepan las cosas por alguien que sabe de lo que se habla, no de oídas http://profesorcuyami.blogspot.com/.

Gracias a usted por hacerlo.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Considero profesora que tiene razón con respecto a la crisis.Para llegar a ser un funcionario tienes que pasar limpia la secundaria y no solo eso(Selectividad , Universidad) y ahora después de tanto esfuerzo para conseguir una vida digna , les quitan este privilegio y por más huelga que hubo,todo quedó en nada.

Pienso que de esta lamentable situación , lo bueno que se puede sacar es que de todo esto, nos queda la sabiduría y el orgullo propio.

En mi opinión pienso profesora que utilizó la argumentación adecuada para defender su forma de pensar.

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